La Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas de la República Argentina (Aciera) ratificó este jueves su conocido rechazo a la legalización del aborto y advirtió que el gobierno procura "imponer por trámite exprés" una ley cuya discusión "claramente ha dividido a toda la ciudadanía en los últimos tiempos".
"Sorprende que siendo un tema de tanta profundidad y causal de división y debate entre los argentinos y argentinas, se pretenda ignorar dicha realidad e imponer por trámite exprés una postura de pensamiento único, buscando presionar partidariamente a los legisladores a votar en un mismo sentido o en caso contrario abstenerse o ausentarse", dijo Aciera en una declaración pública. El pronunciamiento de las iglesias evangélicas fue difundido después del discurso que el presidente Alberto Fernández pronunció el pasado domingo ante la Asamblea Legislativa, donde anunció su decisión de enviar al Parlamento un proyecto para la legalización del aborto. También remitirá otra iniciativa denominada de los "mil días", pensada para garantizar asistencia estatal para las mujeres de bajos recursos, desde el inicio del embarazo hasta los dos años de vida del niño en gestación. No obstante, los evangelistas lamentaron que en ese mensaje "se haya invisibilizado el derecho a la vida de los seres humanos durante su gestación en el vientre materno”, sino que se habla "solamente del supuesto derecho de la madre a acabar con la vida del hijo no nacido, no reconociendo su propia existencia física como ser humano”. "Sería una evidente contradicción haber mencionado la voluntad de querer unir a los argentinos y argentinas, e iniciar la gestión de gobierno queriendo imponer una ley que claramente ha dividido a toda la ciudadanía en los últimos tiempos", señaló la declaración de evangelista. La organización también se mostró sorprendida porque “se haya hecho caso omiso en el discurso presidencial a las normas vigentes sobre los derechos de las personas por nacer, reconocidas en nuestro derecho positivo”. En otro tramo del comunicado, el credo consideró que “no es hipócrita el pensamiento de la ciudadanía que cree en el derecho a la vida de todo ser humano desde su misma existencia". "No son hipócritas los argentinos y argentinas que mantienen sus convicciones personales y las expresan", completó.
