top of page

En tres años, casi el 25% de los quioscos bajó la persiana

Desde 2016, uno de cada cuatro de estos comercios tuvo que cerrar, de acuerdo a un relevamiento realizado por quiosqueros. Resultaron afectados 28 mil locales y advierten que podrían correr igual suerte 10 mil más.

Prácticamente uno de cada cuatro kioscos de la Argentina tuvo que bajar sus persianas en los últimos tres años, debido al combo que significaron los fuertes aumentos en las tarifas y la crisis que impactó en el bolsillo de la gente e hizo bajar el consumo de manera importante.


Así se desprende de un relevamiento en la Unión de Kiosqueros de la República Argentina (UKRA), que estableció en 28 mil la cantidad de ese tipo de locales que cerró desde comienzos de 2016, número que se hizo sentir principalmente en la Ciudad de Buenos Aires, el Conurbano y otras grandes ciudades del interior del país como Córdoba y Mendoza.


El presidente de la UKRA, Néstor Palacios, admitió que a finales de 2015 había 120 mil kioscos en actividad, pero ahora hay unos 28 mil menos y advirtió que “si todo continúa de la misma manera, para junio de este año se podrían perder 10 mil más”.


Al analizar el crítico panorama de este tipo de comercios, Palacios se refirió al descenso en la venta de cigarrillos, golosinas y otros artículos, aunque también puso como ejemplo el incremento de los alquileres en algunas zonas, lo que llevó a algunos dueños a mudarse a la periferia o directamente a cerrar sus puertas.


“Venimos de una caída constante desde el 2016, con 28.000 kioscos cerrados a nivel nacional. Esto es producto de los fuertes tarifazos, el bajo salario de los trabajadores, las jubilaciones y las pensiones. Esto genera que el consumo interno caiga, que las empresas aumenten el precio de los productos y no se puedan vender”, afirmó el titular de UKRA en diálogo con la radio LU6 de Mar del Plata.


Por otra parte, consideró que “hay muchos factores donde la economía argentina no ha dado en la tecla” y también se pronunció sobre “la dificultad para acceder a un crédito y el costo bancario que implica el uso de tarjetas de crédito y débito, que es de entre 1,5% a un 5%, lo que provocó que sobrevivir se torne complicado”.


Palacios explicó que el combo que conforman “tarifazos y la baja en las ventas”, llevó a muchos a bajar las persianas o a pasarse a la periferia o los denominados “kiosco ventana”, es decir las personas que abren el local en su propia casa. “Si recorremos las avenidas importantes de cada ciudad, vemos persianas cerradas con locales en alquileres. Muchos de esos locales eran kioscos, almacenes o polirrubros”, analizó.


El representante de los kiosqueros anticipó que “si sigue la misma política económica, en los próximos seis meses cerrarán 5.000 kioscos en la Ciudad de Buenos Aires y 5.000 en la provincia sin contar el resto del país” e intentó hacer una proyección sobre la mano de obra que se perdió: “Si cada kiosco tenía un empleado, como mínimo se perdieron 28.000 puestos de trabajo en los últimos tres años”.


“Los alfajores y las galletitas bajaron las ventas un 25%, la gente opta por segundas y terceras marcas”, añadió el referente de UKRA, quien precisó que por eso los comerciantes apuntan a ese rango de productos, algo que, según confesó, ocurre hasta con los cigarrillos.

“Cada vez más ofrecemos alimentos de primera necesidad como fideos o arroz, para compensar”, reconoció Palacios.

DESTACADAS

Descacharrado - Banner Publicidad - Municipalidad de Salta.gif
Publicidad - Gobierno de Salta - Prevención Dengue 2.gif
bottom of page